El huerto o granja familiar es una de las técnicas agroecológicas más
utilizadas en zonas tropicales, aunque con una marcada presencia en zonas frías
a través del uso de invernaderos. Esta técnica es considerada de orígenes
ancestrales utilizada para suplir las necesidades de los pequeños grupos
humanos.
La presencia de esta técnica a nivel mundial ha garantizado la seguridad
alimentaria en extensas zonas rurales y han suplido las necesidades en diversas
zonas urbanas. El huerto familiar se mantiene a través del tiempo y es quizá el
más futurista de los legados agrícolas de nuestros ancestros. Además de contar
con un gran potencial ecológico y conservación de la biodiversidad en un
contexto local y regional.
¿Que son los huertos familiares?
Los huertos familiares son pequeños
ecosistemas de producción agrícola que integran funciones físicas, económicas y
sociales y que se ubican en lugares cercanos a la residencia familiar
permanente o temporal.
Los huertos familiares están en capacidad de producir diversos alimentos
como vegetales, hortalizas y frutas dirigidas al consumo familiar, garantizando
la seguridad alimentaria y así como también comercializar estos alimentos constituyendo
una pequeña empresa, la cual ayuda a mejorar los ingresos de la familia y
ampliar la producción en base a las necesidades.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO) ha establecido que los huertos familiares pueden llevar a cabo
funciones
físicas como el almacenamiento, lavado y secado de los alimentos, funciones
económicas como el huerto mixto, que incluye alimentos, árboles frutales,
forraje, condimentos, plantas medicinales; además de cría de aves, conejos y
otros animales menores. Entre las funciones sociales incluyen un espacio para
reuniones y para juegos de niños y otras actividades importantes de la familia.
Por lo general un grupo
familiar destina un área que puede ser reducida para el huerto, así como
también un área de mayor extensión para la producción de alimentos u otros
productos tanto para el consumo como para la comercialización.
Ventajas del Huerto
El huerto familiar aporta una cantidad suficiente de alimentos a la familia
para varios meses o todo un año. Esta técnica agroecológica aporta un buen uso
del suelo, con la utilización de agrofertilizantes amables con el medio
ambiente. Entre los aportes están las herramientas técnicas que pueden adquirir
los miembros del grupo familiar para la expansión de los cultivos.
Entre las ventajas aportadas por un huerto familiar están los ingresos por
la venta de los alimentos cosechados, los cuales pueden contribuir a mejorar
los ingresos económicos de las familias, adquirir nuevos insumos para extender
el huerto, aumentar la producción y ampliar la comercialización de los mismos a
precios mucho más bajo que el encontrado en el mercado.
El desarrollo de viveros, procesamiento y conservación de semillas y bancos
de semillas son otras de las ventajas que adiciona el trabajo y producción en
un huerto familiar.
Dimensiones y construcción
Primeramente se debe seleccionar lote de terreno donde va a
estar ubicado el huerto. Su tamaño debe ser adecuado a tal forma que pueda satisfacer
la demanda familiar y que pueda ser manejado por ellos mismos.
Una vez que se ha
seleccionado el terreno este debe limpiarse y adecuarse para la siembra. El
control de plagas y malezas es fundamental en esta parte del proceso, puesto
que debe limitarse toda planta o escombro que pueda impedir el buen desarrollo
de los cultivos.
El terreno seleccionado
debe romperse hasta el punto de dejarlo completamente suelto y listo para la
siembra. En este proceso si es necesario pueden utilizarse algunos abonos.
Una vez que el grupo se familiariza con la siembra y el crecimiento del
cultivo, pueden ampliarse las extensiones del terreno para continuar con
diversos alimentos. Para esto es necesario que realice un croquis donde se
puntualice la ubicación del huerto, la superficie que cubrirá, la cual la
determina el número de alimentos que se
buscan producir, de lo cual dependerá
Hay que tener en cuenta que una vez se obtenga la primera cosecha en cada
uno de los espacios, es necesario aplicar una rotación de cultivos para
mantener las condiciones salubres del suelo y garantizar una buena cosecha.
Las dimensiones del huerto, así como las hortalizas, frutas y vegetales que
se esperan sembrar tendrán que adaptarse a las condiciones geográficas de la
localidad y al cuidado que se les suministre.
¿Cuándo puedo plantar?
En los huertos familiares a
cielo abierto la siembra dependerá de la época del cultivo y de la estación
climatológica más conveniente para el cultivo. Si el huerto familiar se
desarrollará bajo la modalidad de invernadero la siembra y producción de cultivos
puede hacerse de forma continua durante todo el año.
¿Cómo
Plantar?
Para garantizar la
cosecha de un buen producto es necesario la utilización de semillas de calidad.
Algunas semillas más grandes generalmente producirán plantas más grandes y
vigorosas que aquellas producidas con semillas pequeñas. Como regla general se
ha establecido que las semillas deben sembrarse a una profundidad que equivale
a tres veces el tamaño de su diámetro.
Hay que tomar en cuenta que algunas de las semillas deben previamente ser
sembradas en un semillero o almácigo para luego ser trasplantadas.
El proceso de trasplantación consiste llevar al huerto pequeñas plantas que
ya fueron germinadas previamente en algún semillero o almácigo; esta técnica es
muchas veces necesaria puesto que algunas semillas de hortalizas son muy
pequeñas y delicadas, para las cuales es difícil encontrar terrenos en buenas
condiciones. Algunas plantas de trasplante como el tomate, el pimentón, la berenjena,
la cebolla y otras deben llevarse al campo cuando alcancen de 12 a 15 cms de
altura.
Los semilleros son muy recomendables puesto que se puede preparar en ellos
una tierra especial, ligera, muy nutrida, con mucha materia orgánica que
garantice una excelente germinación de la planta.
Cartones de leche, latas de aceite, envases de refrescos, cajones de madera
y vasos plásticos son buenos materiales para hacer semilleros o almácigos. El
huerto se dividirá en pequeños canteros o surcos de tierra. El riego dependerá
también de la forma del huerto; los canteros han de regarse con regadora de
mano y los surcos con gravedad, llenando el surco con agua.
La
cosecha
La cosecha viene a marcar
la etapa final del crecimiento de un fruto en particular, el cual deber
recogerse para el consumo humano. El proceso de la cosecha dependerá de que
hayamos sembrado. Es recomendable sembrar en diferentes épocas del año para así
mantener una cosecha continua de diferentes alimentos, así como su recolección
por las mañanas y no hacerlo en horas cuando haya mayor radiación solar.
Por tradición los huertos
familiares se hallan en constante desarrollo, por tanto se constituye una
herramienta necesaria para el aprovechamiento de los cultivos para pequeños
grupos familiares; organizados y con recursos para ampliación del huerto pueden
llegar a comercializar los alimentos en su entorno. La conservación de las
pequeñas parcelas familiares se ha convertido en una tarea fundamental para el
campesinado y en general para el desarrollo rural, garantizando la seguridad
alimentaria en zonas alejadas de los grandes comercios, además sirve para
conservar nuestros suelos y hacerlos cada vez más fértiles.